Suele aparecer entre los 15 y 35 años y afecta a un 2,3 % de la población
La psoriasis es una enfermedad inflamatoria de la piel caracterizada por placas rojas cubiertas de escamas blanquecinas que se desprenden. Normalmente se localiza en cualquier parte del cuerpo, pero es más frecuente en los codos, el cuero cabelludo y las rodillas.
Según la Asociación de Pacientes de Psoriasis, Artritis Psoriásica y Familiares, suele aparecer entre los 15 y 35 años y afecta a un 2,3 % de la población.
Aunque no se conoce la causa exacta de la psoriasis, se sabe que existe una predisposición genética a padecerla. Además, tal y como explica la Academia Española de Dermatología y Venereología, algunos estímulos, como infecciones, estrés o medicamentos, pueden desencadenar o empeorar la enfermedad.
TIPOS DE PSORIASIS
- Psoriasis en placas: es la más frecuente y se caracteriza por lesiones rojas bien delimitadas que no tienen un tamaño específico.
- Psoriasis en gotas: las lesiones son pequeñas, numerosas, y se distribuyen de forma irregular por todo el cuerpo, señala la Asociación de Pacientes de Psoriasis, Artritis Psoriásica y Familiares.
- Psoriasis pustulosa: es poco habitual y se manifiesta con ampollas llenas de pus.
- Psoriasis eritrodérmica: las lesiones cubren casi toda la superficie cutánea.
- Psoriasis invertida: las placas tienen un color más rojizo, son menos descamativas y se manifiestan alrededor de los genitales, debajo del pecho o en las axilas.
- Psoriasis en la cara: no suele ser frecuente, pero puede afectar a la calidad de vida de quien la sufre.
- Psoriasis en las uñas: esta afectación, destaca la Asociación de Pacientes de Psoriasis, Artritis Psoriásica y Familiares, es variable, ya que algunos pacientes no la tienen, otros tienen pequeños ‘’puntos’’ en las uñas y otros tienen manchas amarillas.
- Psoriasis en el cuero cabelludo: es la más habitual y se caracteriza por la descamación seca en una zona del cuero cabelludo.
- Psoriasis en las palmas: son placas muy secas e hiperqueratósicas.
TRATAMIENTO PARA LA PSORIASIS
En la actualidad no existe una cura definitiva para la psoriasis y un tratamiento específico para todos los pacientes, por lo que el dermatólogo deberá decidir cuál es el más apropiado para cada persona teniendo en cuenta la gravedad de la enfermedad.
Si la psoriasis es leve se puede controlar con tratamiento tópico, es decir, aplicando medicamentos sobre la piel; pero si la afectación es más grave habrá que recurrir a un tratamiento sistémico, como medicamentos orales, subcutáneos, intramusculares o intravenosos. La fototerapia, la exposición a la luz ultravioleta,también es un método muy efectivo para la psoriasis más grave.