Esclerosis Múltiple (EM): síntomas, diagnóstico y tratamiento

La esclerosis múltiple se caracteriza por atacar a la mielina de las células nerviosas (neuronas) por error

La esclerosis múltiple es una enfermedad crónica autoinmune, inflamatoria y degenerativa del sistema nervioso central.

Las causas en la actualidad se desconocen, “aunque la mayor parte de los estudios realizados apoyan la existencia de factores ambientales que, actuando sobre individuos genéticamente predispuestos, desencadenan el fenómeno autoinmune a través del cual se desarrollan los procesos inflamatorios degenerativos en el sistema nervioso central”, señalan desde la Sociedad Española de Neurología.

Recientemente un estudio publicado en la revista ‘Science’ apuntaba a una posible asociación entre el virus de Epstein-Barr y la esclerosis múltiple. No obstante, desde la SEN explican que no está claro por qué la esclerosis múltiple se manifiesta en algunas personas con dicho virus y en otras no.

Más allá de esta cuestión, la EM se caracteriza por atacar a la mielina de las células nerviosas (neuronas) por error. Por ello, según explican desde Esclerosis Múltiple España, los nervios se extienden a lo largo de todo el cuerpo, así que la EM puede manifestarse en muchas partes del organismo y hacerlo de maneras muy diferentes, de ahí que se la conozca como la “enfermedad de las mil caras”.

Afecta más a las mujeres que a los hombres y suele iniciarse entre los 20 y los 40 años. En la actualidad, no se dispone de tratamientos curativos para esta enfermedad, aunque sí medicamentos que permiten controlar o ralentizar su progresión.

SÍNTOMAS

Según la Asociación Esclerosis Múltiple España, la mayoría de las personas con EM experimentará un conjunto diferente de síntomas, y aunque hay algunos comunes, éstos pueden variar en severidad y duración, incluso en la misma persona.

De esta forma, en  primer lugar los signos de la EM pueden ser:

  • Fatiga crónica.
  • Problemas de visión.
  • Dolor y espasmos.
  • Cosquilleo y entumecimiento.
  • Problemas de equilibrio, movilidad.
  • Problemas urinarios.
  • Mareos, etc. 

Posteriormente la mayoría de los pacientes sufren fatiga crónica que les dificulta realizar actividades tan simples como moverse de un lado a otro de la casa. También temblor postural, falta de coordinación de los movimientos, trastornos del habla, problemas de movilidad y trastornos cognitivos como problemas de memoria a corto plazo, trastorno de la concentración, discernimiento y/o razonamiento, entre otros.

DIAGNÓSTICO

Esta enfermedad se diagnostica en base a los síntomas: brotes, sistema neurológico, irregularidades de la visión o el equilibrio, etcétera. Además se realizan pruebas para conocer la situación del cerebro y de la médula espinal y así poder detectar las lesiones causadas por la desmielinización.

TRATAMIENTO

Una vez diagnosticada, se inicia un tratamiento combinado de fármacos y rehabilitación para mejorar la calidad de vida de las personas afectados por la EM. Un abordaje multidisciplinar y el compromiso de los pacientes en la gestión de su enfermedad con la apuesta por hábitos de vida saludable y la adherencia a los tratamientos son de gran importancia para su control.

Consejos y sugerencias para afrontar una colonoscopia

Su realización consiste en insertar un tubo largo y flexible que pasa a través del ano y examina todo el colon

El cáncer de colon será el tumor más frecuente diagnosticado en España en 2022 de forma global con más de 43.000 casos, según los últimos datos de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM). A nivel global, es el tercer tumor maligno más frecuente del planeta y el responsable de 935.000 muertes cada años, según la Sociedad Española de Endoscopia Digestiva (SEED).

La técnica que se utiliza para su diagnóstico es la colonoscopia, y según explican desde la SEED, su realización consiste en insertar un tubo largo y flexible que pasa a través del ano y examina todo el colon. No obstante, la colonoscopia permite también diagnosticar y detectar otras problemas de salud.

Durante una colonoscopia, si es necesario, se pueden extirpar pólipos u otros tipos de tejido anormal, así como también pueden tomarse muestras de tejido o biopsias.

Este procedimiento diagnóstico permite a los expertos ver el intestino por dentro y analizar o detectar si se han producido cambios o anomalías.

Para realizar este procedimiento se requiere un intestino grueso libre de restos fecales, por lo que es necesaria una preparación previa de al menos tres días, donde se comenzará con una dieta baja en residuos. Estarían permitidos alimentos como:

  • Leche y yogur natural desnatados.
  • Mantequilla en poca cantidad.
  • Quesos frescos y quesos duros.
  • Arroz, pastas, galletas, pan blanco o tostado no integrales.
  • Caldos sin verduras.
  • Carnes y pescados blancos a la plancha o cocidos.
  • Café, té e infusiones ligeras.
  • Patatas sin piel en puré o cocidas.
  • Melocotón en almíbar, manzana y pera cocida o asada, sin piel.

Por otro lado, durante esos días no se pueden ingerir productos lácteos enteros, verduras y legumbres, quesos grasos, frutas, carnes grasas, embutidos, pescados azules, chocolate, pasteles y frutos secos.

Además, es muy importante que el día anterior de la colonoscopia no se tomen alimentos sólidos, sobre todo tres o cuatro horas antes de empezar con la limpieza intestinal. Solo se pueden tomar zumos de fruta colados, café o té, agua, infusiones o caldos filtrados.

Independientemente de estos consejos y/o recomendaciones, debe seguir las recomendaciones prescritas por su médico.

Cómo prevenir y tratar la incontinencia urinaria en el postparto

Esta patología se atribuye sobre todo al embarazo y al parto, limitando la autonomía y reduciendo la autoestima y la calidad de vida de estas mujeres.

Entre el 3 y el 67% de las mujeres que han dado a luz sufren incontinencia urinaria. De hecho, en el caso de presentarse en los tres meses posteriores al embarazo, hay un 90% de probabilidades de seguir padeciéndola cinco años después. Esta patología se atribuye sobre todo al embarazo y al parto, limitando la autonomía y reduciendo la autoestima y la calidad de vida de estas mujeres.

Un suelo pélvico débil puede provocar incontinencia urinaria de esfuerzo, que se produce cuando el movimiento o la actividad física (como toser, reír, estornudar, correr o levantar objetos pesados) ejerce presión (estrés) sobre la vejiga, y provoca pérdidas de orina.

Durante el embarazo se dan numerosos cambios en el tejido del suelo pélvico producidos por el peso que debe soportar a lo largo de todo este período y, durante el parto, la musculatura del suelo pélvico se ve doblemente afectada por el paso del bebé y el esfuerzo que la madre produce para empujarle.

Es por ello que es de vital importancia ejercitar el suelo pélvico cuanto antes para poder prevenir posibles patologías relacionadas.

BENEFICIOS DE EJERCITAR EL SUELO PÉLVICO
  • Ayuda a disminuir y controlar las pérdidas de orina. Fortalecer el suelo pélvico mediante ejercicios específicos (también conocidos como ejercicios de Kegel), además de cambios en el estilo de vida y forma física, ayudará a mejorar la fuerza y la estabilidad del núcleo y a controlar las pérdidas de orina.
  • Mejora la vida sexual, especialmente la de las mujeres, que se ve afectada durante el embarazo por la debilitación de los músculos del suelo pélvico y causa que estas no logren disfrutar completamente de sus relaciones sexuales. Fortalecer el suelo pélvico a través de ejercicios Kegel ayuda a mejorar la fortaleza muscular y mejora la circulación en la vagina, lo cual permite experimentar orgasmos más intensos.
  • Ayuda a sostener la columna vertebral y, por lo tanto, a mejorar la postura. Una mala postura puede cambiar la posición del suelo pélvico y provocar el estiramiento o la tensión de sus músculos, y con ello una disminución de la fuerza muscular. Es por esto que la práctica de la elevación correcta durante la rehabilitación del suelo pélvico es de suma importancia.
  • Ayuda a controlar la vejiga durante el embarazo, aceleran la recuperación posparto y reducen el riesgo de prolapso.

Y no olvides visitar a tu ginecólogo de forma regular.

Seis razones por las que debes practicar taichí

Se conoce como ‘meditación en movimiento’ y tiene muchos seguidores que han encontrado grandes beneficios para la salud, tanto mental como física

El taichí es una disciplina ancestral que ofrece relajación, reduce el estrés y la ansiedad, a la vez que mejora la flexibilidad del cuerpo y el equilibrio de la mente. Sus movimientos no son arriesgados ni rápidos, por el contrario, son lentos y siguen el ritmo de la respiración. Se le conoce como ‘meditación en movimiento’ y tiene muchos seguidores que han encontrado grandes beneficios para la salud, tanto mental como física.

Estas son algunas razones para practicar taichí:

  • Mejora la fuerza muscular

Aunque no lo parezca, los movimientos lentos del taichí ayudan a mejorar la fuerza muscular como lo haría un entrenamiento con pesas. Además, mejoran el andar y alivian el dolor en personas que sufren padecimientos crónicos, como cáncer y artritis.

  • Aporta energía vital

En el taichí se habla de la energía como “Qi” o “Chi”, tal como se le denomina en el Taoísmo filosófico. Según esta disciplina y la medicina tradicional china, la energía debe fluir por el cuerpo libremente, pero también hacerlo por las vías correctas. Si esto no sucede, es cuando aparecen las enfermedades y los dolores, es decir, el Qi está bloqueado.

Los lentos y suaves movimientos del taichí están diseñados para desbloquear el Qi y activar ese flujo de energía. Cuando esto sucede, se logra un mayor bienestar en los músculos, en el aparato respiratorio, en el circulatorio, etc. De esta forma, nuestro organismo se fortalece ante las enfermedades.

  • Se fortalecen las extremidades superiores e inferiores

La práctica del taichí se realiza de pie. Los brazos se usan para realizar los movimientos que van gradualmente de simples a complejos. En estos movimientos se trabajan las articulaciones, lo que las fortalece, las oxigenan y tonifican.

  • Mejora el funcionamiento del sistema cardiovascular y respiratorio

Los movimientos suaves y progresivos del taichí fortalecen los sistemas cardiovascular y respiratorio. Esta disciplina combina movimientos dinámicos con pausas, lo que ayuda a disminuir la frecuencia cardiaca, pero aumentando la circulación. Al basar estos movimientos en la respiración, la práctica de esta disciplina aumenta la capacidad respiratoria, lo que oxigena al cerebro.

  • Previene enfermedades, caídas y fortalece las articulaciones

Los movimientos del taichí permiten trabajar las caderas, los tobillos, las rodillas y las manos, lo que las fortalece y las flexibiliza. Progresivamente, se usa la fuerza y se realizan movimientos amplios con el cuerpo. La combinación de estos disminuye el riesgo de caídas y lesiones, puesto que el cuerpo se tonifica y mejora el equilibrio.

  • Alivia el insomnio, las migrañas y los dolores musculares

Las posturas que se adoptan en la práctica del taichí permiten que se adopten mejores posiciones en la vida diaria, además de que se relajan los músculos, lo que disminuye las migrañas y otros dolores.

También es bueno destacar que el equilibrio físico y mental que brinda la práctica de este arte milenario ayuda a aliviar el insomnio.

Cómo saber si estás bien hidratado

La Fundación Española del Corazón señala que, recientemente, se ha observado que una mala hidratación causa una contracción del tejido cerebral que se asocia a un aumento del volumen ventricular, llegando a afectar negativamente en la respuesta de nuestro cerebro a una actividad intelectual.

Así, procesos mentales como la memoria, el aprendizaje o la capacidad de atención pueden disminuir por falta de líquidos, sobre todo cuando el cuerpo sufre pérdidas de más del 2%.

Por otro lado, otros síntomas que alertan de una mala hidratación son los propios de la pérdida de volumen circulatorio y consisten en:

  • Frialdad de la piel
  • Relleno capilar lento
  • Taquicardia
  • Pulso débil, hipotensión arterial
  • Signo del pliegue, ojos hundidos, mucosas secas y oliguria (disminución de la producción de orina)

Para evitar una hidratación inadecuada, las necesidades de agua dependen de factores externos (extrínsecos) de la persona como son la actividad física, la temperatura del ambiente y factores internos (intrínsecos) como la secreción de sudor o el balance electrolítico (relación entre la ingesta de líquidos  y la cantidad que sale del organismo).

En la recomendación de ingesta de agua, se incluyen: el agua contenida en alimentos, bebidas y agua propiamente.

¿CÚAL ES LA CANTIDAD DE AGUA A INGERIR?

En la población adulta, se recomienda una ingesta entre 3.7 L/día en hombres y 2.7 L/día en mujeres. En el caso de las mujeres, la ingesta debe aumentar en la gestación y, especialmente, durante la lactancia a 3.8 L/día.

Los lactantes y ancianos tienen alterada la sensación de sed y pueden no sentir la necesidad por beber agua, por lo que son considerados como población de riesgo para la deshidratación.

En situaciones de hidratación inadecuada, las bebidas con sales minerales, en concreto sodio, y con azúcares de absorción rápida, pueden facilitar una mejor rehidratación.

A su vez, es conveniente hidratarse antes, durante y después de realizar ejercicio. 

De igual modo, hay que seguir una dieta variada y equilibrada, rica en frutas y verduras frescas, ya que estos alimentos son muy ricos en agua y nos pueden ayudar a mantener un buen nivel de hidratación.

MÉTODOS PARA CONOCER EL ESTADO DE LA HIDRATACIÓN

Existen dos métodos muy fáciles para controlar el estado de hidratación y saber si es el correcto o, por el contrario, necesitamos beber más agua.

  • Test del color de la orina: el color de la orina es un indicador del estado de hidratación. En concreto, este test consiste en comprobar de qué color es la orina y, seguidamente, compararlo con la escala de colores, del 1 al 8. Los amarillos más claros, del 1 al 3, corresponden a una correcta hidratación; mientras que los más oscuros, del 4 al 8, significan que es necesario beber más agua para volver a tener unos buenos niveles de hidratación.
  • Test de sudoración: se trata de un método matemático que calcula la deshidratación en función del peso perdido durante el ejercicio.

Si presentas signos de deshidratación previamente comentados, debes aumentar la ingesta de agua y al mismo tiempo acudir a tu médico para una valoración más precisa. 

Consejos para combatir el mal aliento

La halitosis o mal aliento tiene generalmente origen bucal, pero también hay una proporción de pacientes que padece este problema por otras causas

El aliento o aire que expulsamos por la boca al respirar o al hablar, varía de una persona a otra. Aunque cada uno de nosotros puede padecer cierto grado de halitosis de manera ocasional, hay quienes la sufren durante todo el tiempo.

La halitosis o mal aliento tiene generalmente un origen bucal (60% de los casos), pero también hay una proporción de pacientes (20%) que padece estos problemas por otras causas, como patologías digestivas, alteración de la microbiota, patologías respiratoria etc.

A estos dos grupos, se suma un 20% que cree de manera errónea que padecen este trastorno, una falsa sensación provocada por tener la boca seca, el estrés o la ansiedad, según la Fundación Dental Española.

Generalmente, el mal aliento es fruto de la acumulación bacteriana en la boca o entre los dientes, o de restos de comida alrededor de las encías y la lengua, que a su vez desencadenan la floración de bacterias que provocan caries.

Asimismo, tras la ingesta de determinados alimentos y bebidas comunes, también se puede producir mal aliento, incluso después de habernos lavado los dientes. Uno de los principales métodos para evitarlo, es una buena higiene bucodental, que conste de uso del hilo dental, cepillado de los dientes, con limpieza regular de la lengua, más que centrarse únicamente en el empleo de enjuagues orales o aerosoles para camuflar el mal aliento.

Además, también puede resultar efectivo:

  • Evitar comidas con exceso de condimentos o los alimentos que pueden producir mal aliento.
  • Dejar de fumar.
  • Evitar el consumo de café y alcohol.
  • Controlar la ingesta de mucha proteína y pocas calorías.
  • No consumir alimentos con mucha grasa.
  • Beber mucha agua.
  • Intentar respirar siempre por la nariz.
  • Compra un cepillo de dientes nuevo con regularidad.

Y, sobre todo, no olvides que es necesario visitar a tu dentista de forma regular.

5 beneficios de la cúrcuma para la salud

Su uso está extendido por toda la gastronomía india, utilizado para condimentar y dar color

La cúrcuma es una especia cada vez más utilizada en nuestro país. Es un rizoma de la familia del jengibre, catalogada como una planta herbácea perenne (Cúrcuma longa), con piel áspera y pulpa de color naranja brillante. Se utiliza fresca, seca y molida principalmente.

Su uso está extendido por toda la gastronomía india, utilizado para condimentar el arroz, la carne y el curry. Además, se utiliza como componente para otorgar a los platos ese tono amarillo intenso, según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).

Desde la antigüedad se han descrito múltiples beneficios para la cúrcuma:

  • Efectos antiinflamatorios
  • Antioxidantes
  • Capacidad inmunomoduladora
  • Disminuye el colesterol, colesterol LDL y los triglicéridos
  • Actividad antibacteriana, antifúngica y antiparasitaria

Todas estas propiedades hacen que la cúrcuma sea una excelente aliada para adelgazar, mejorar el tránsito intestinal, potenciar el sistema inmune, mejorar la artritis, prevenir el cáncer, reducir el riesgo de enfermedades cerebrales y retrasar el envejecimiento, según la Federación Española de Actividades Dirigidas y Fitness (FEDA).

Desde un punto de vista nutricional, debido a la escasa cantidad que se utiliza para la elaboración de platos o infusiones, su valor nutricional es escaso. No obstante, contiene fibra, proteínas sobre todovitaminas del grupo B, vitamina C, hierro, yodo y calcio.

Un punto importante a destacar es que desde la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) recomiendan a los menores de 18 años, mujeres embarazadas y lactantes, evitar el consumo de complementos que contengan curcumina (un colorante natural que se extrae de la cúrcuma).

¿Cómo saber si tengo intolerancia a la lactosa?

Existen numerosas pruebas para medir la capacidad que tiene el cuerpo de absorber la lactosa

La lactosa es un tipo de azúcar que se encuentra en la leche y en otros productos lácteos. No todos los organismos ingieren la lactosa de manera adecuada, hay quienes tienen problemas para hacerlo, ya que su cuerpo no dispone de una enzima llamada lactasa, en estos casos hablamos de personas con intolerancia a la lactosa.

Según la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD), la intolerancia a la lactosa puede reconocerse por una serie de síntomas frecuentes, aunque en ocasiones puede haber sintomatología atípica.

Existen numerosas pruebas para medir la capacidad que tiene el cuerpo de absorber la lactosa. La más comunes son el test de la gaxilosa en orina, la prueba de la tolerancia a la lactosa, el análisis de biopsias de duodeno, aunque la más difundida es el test del aliento de hidrógeno.

Respecto a las molestias que causa, en condiciones normales, al tomar lactosa ésta es degradada por la lactasa intestinal, lo que permite su correcta absorción en el intestino. Si, por cualquier motivo, la producción de lactasa intestinal es insuficiente, al tomar lactosa ésta no se digiere correctamente y se fermenta en el colon, provocando los síntomas de intolerancia.

Estos síntomas dependen, básicamente de la cantidad de lactosa que se tome y de la actividad de lactasa intestinal que exista. Si se ingiere más lactosa de la que puede digerir el intestino se desencadenarán los síntomas. Las personas que no toleran la lactosa refieren:

  • Diarrea
  • Dolor abdominal
  • Distensión abdominal
  • Flatulencia
  • Borborigmos, etc.

¿QUÉ ALIMENTOS PUEDO COMER?

Los pacientes que tengan intolerancia a la lactosa deberán realizar una dieta que contengan pocos derivados de la leche y los lácteos. No es necesario privarse de la lactosa por completo, en la mayoría de los casos se puede tolerar el consumo de pequeñas cantidades. Entre estos alimentos se incluiría la mantequilla, el queso azul, la leche sin lactosa, yogurt o queso desnatado.

Sin embargo, los alimentos que deben restringirse, ya que contienen más de 5 gramos de lactosa son la leche en cualquiera de sus formatos, la nata, la bechamel, el queso de untar, el helado o leche helada y el requesón cremoso o seco.

No obstante, si presentas algunos de los síntomas comentados, te recomendamos que consultes con tu médico.