¿Por qué debemos proteger nuestro cabello del sol?

Los rayos UV afectan negativamente a la cutícula de las fibras capilares

En los meses de verano es cuando más pensamos en protegernos del sol, pero generalmente sólo nos enfocamos en cuidar de nuestra piel con crema solar. Sin embargo, ¿has pensado alguna vez si nuestro cabello necesita también algún tipo de protección? Porque la respuesta es que sí y lo cierto es que la mayoría de nosotros pasa por alto esta parte del cuerpo.

Al igual que los rayos solares son nocivos para nuestra piel, el pelo también sufre sus consecuencias. Además, cumple una función biológica vital, que es proteger nuestra cabeza y cuero cabelludo de los agentes externos (sol incluido). Por lo tanto, su protección debe preocuparnos por este y por otros motivos. El principal de ellos, por el daño estructural que ocasiona en las fibras capilares, dañando la cutícula o capa externa que protege el interior del cabello y cuyo deterioro provoca pérdida de humedad y fragilidad.

El sol también propicia la sequedad del pelo, haciéndolo más propenso al encrespamiento, puede causar el desgaste de color (especialmente en cabellos teñidos), afectar a su luminosidad natural y hacer que pierda proteínas como la queratina, componente esencial que le da fuerza y elasticidad. En definitiva, los rayos solares ocasionan un desgaste a todos los niveles, que termina debilitando las fibras capilares y favoreciendo su caída.

¿Cómo podemos proteger el cabello?

Atendiendo a todos estos motivos, ahora comprendemos por qué debemos proteger el cabello durante la exposición solar. A continuación, te contamos cómo puedes hacerlo:

  • Utiliza sombreros o pañuelos, que proporcionan sombra directa al cabello y también protegen el cuero cabelludo. Los sombreros de ala ancha son los mejores accesorios para cubrirnos.
  • Aplica protector solar para el cabello, un producto específicamente formulado para el pelo que ayuda a bloquear los rayos UV y a mantener la humedad.
  • Evita la exposición al sol en las horas de mayor incidencia, esto es entre las 11:00h y las 17:00h. Mantente a la sombra o en espacios al interior no sólo para proteger tu cabello del sol, sino para evitar la deshidratación y los golpes de calor.
  • Escoge productos capilares que incorporen protección UV, ya que algunos champús, acondicionadores y cosméticos para peinar están diseñados para proteger frente a los daños solares. Así garantizarás una protección completa del cabello en tu rutina.
  • Mantén el cabello bien hidratado con el uso de acondicionadores y mascarillas ricas en nutrientes. Una hidratación adecuada ayuda a proteger la cutícula y a mantener las fibras capilares más fuertes, evitando la pérdida de humedad.
  • Opta por llevar peinados que protejan más del sol, como las trenzas o los moños.  Así cubrirás una mayor parte del cabello que si decides lucir melena suelta.
  • No utilices en exceso planchas, secadores o tenacillas calientes, con el objetivo de minimizar el daño sobre el cabello y no contribuir a su debilidad. 

¿Cuáles son los helados más saludables?

Con estas opciones, podemos recurrir a los helados para refrescarnos en verano sin remordimientos

Combatir el calor en verano no es tarea fácil: ingerimos mucho más agua, buscamos planes de interior o a la sombra, ropa más ligera, días de playa y piscina… Y otra alternativa para refrescarnos desde dentro son los helados, aunque siempre deberíamos optar por los más saludables para evitar que las calorías, los azúcares y las grasas que nos aportan consigan exactamente el efecto contrario.

Puede que no lo creas, pero disfrutar de los helados sin remordimientos es posible. Simplemente debemos hacer un consumo responsable, seleccionando aquellos elaborados con los ingredientes más saludables, con un bajo contenido en azúcar para evitar los picos de glucosa y que sean nutricionalmente interesantes. Aquí te dejamos las mejores ideas de helados saludables para que te decantes por ellos este verano:

  • Helados de frutas naturales: son, sin duda, la opción que más conjuga con nuestro bienestar. Las frutas aportan vitaminas, antioxidantes y fibra, además de brindar un sabor naturalmente dulce que evita las cantidades excesivas de azúcar. Busca helados que utilicen frutas frescas y sin aditivos artificiales para obtener el máximo beneficio para tu salud.
  • Helados bajos en grasas y calorías: algunas marcas elaboran productos reducidos en grasas y calorías para disminuir el aporte energético y no aumentar los niveles de colesterol en sangre. Por lo tanto, esta alternativa cuida nuestra figura y también podemos incluirlos dentro de nuestra dieta equilibrada. Dentro de esta categoría tenemos los helados hechos con leche descremada o leches vegetales, que reducen considerablemente la cantidad de grasas a ingerir.
  • Helados de leche vegetal: también son más bajos en grasas porque sustituyen la nata o leche cremosa por derivados de vegetales obtenidos de su semilla o fruto, como pueden ser la soja, las almendras o el arroz. Además, son una opción muy interesante para las personas que siguen una dieta vegana o que son intolerantes a la lactosa.
  • Helados sin azúcares añadidos: utilizan otros edulcorantes artificiales o naturales como sustitutos del azúcar, que son mucho menos calóricos y reducen los picos de glucosa en sangre. Estos helados están especialmente indicados para diabéticos, de tal forma que no tengan que renunciar a ellos. Eso sí, conviene verificar las etiquetas para asegurarse de que no contengan azúcares ocultos o exceso de edulcorantes.
  • Helados con probióticos: son beneficiosos para la salud intestinal, ya que aportan microorganismos saludables que promueven el equilibrio de la flora intestinal y, consecuentemente, mejoran las funciones digestivas y fortalecen el sistema inmune.
  • Helados caseros: nada mejor dentro de las opciones saludables que los helados que puedas hacer tú mismo, teniendo el control de los ingredientes que utilizas. Puedes probar distintos tipos de frutas, leches vegetales, endulzantes y otros ingredientes saludables para crear helados personalizados según tus preferencias.

Recuerda que, aunque esta lista de helados sea más saludable, hay que seguir controlando el tamaño de la porción, pues no dejarán de aportarte calorías. También te recomendamos reservarlos para ocasiones especiales y no convertirlos en un hábito diario por el mismo motivo, consumiendo los helados a modo de postre y después de comidas ligeras, preferiblemente nunca acompañando las cenas.

Técnicas para relajarte y olvidarte del estrés en verano

Aunque nos vayamos de vacaciones, no siempre somos capaces de desconectar de la rutina

El verano es la época favorita de muchas personas y no sólo porque las buenas temperaturas y el mayor número de horas de luz que tenemos a lo largo del día generan un impacto positivo en nuestra autoestima. Además, llegan las merecidas vacaciones y, con ellas, una oportunidad de desconectar del trabajo y de nuestras responsabilidades diarias para cargar las pilas.

Sin embargo, cada vez nos es más difícil desconectar, bien porque estamos enganchados al teléfono, a las redes sociales o porque no nos fijamos unas planes que nos lo permitan del todo. Pero desconectar es obligatorio para asegurarnos un buen rendimiento durante el resto del año y no sufrir efectos negativos en el medio y largo plazo que tienen que ver con nuestra capacidad de concentración, neurológica y cognitiva.

Con motivo del Día Mundial de la Relajación que se celebra este martes, 15 de agosto, y para que puedas disfrutar plenamente del verano y renovarte por completo, aquí te dejamos los pasos imprescindibles que te lo permitirán de verdad.

  • Nuestro primer consejo es muy evidente: desconecta de la tecnología. Practica lo que ya se conoce como ‘ayuno tecnológico’, fijándote un límite de horas al día en las que uses tus dispositivos electrónicos. Los smartphones y tablets en el entorno digital hacen que tengamos que estar siempre conectados para no perdernos ningún evento y permanecer disponibles de manera constante, incluso con nuestro entorno laboral, añadiendo un estrés innecesario a nuestras vidas. Nosotros te recomendamos fijar un máximo de dos horas, utilizando el móvil para actividades estrictamente necesarias y no en periodos más largos de 10 minutos. Si te es difícil controlar el tiempo, puedes instalar una aplicación en tu dispositivo que te cronometre. Comprobarás que, en cuanto logres tu objetivo un par de veces, ¡no querrás volver atrás!
  • Si eliminas el uso de los dispositivos electrónicos de tus días, comprobarás cuántas horas te quedan disponibles para hacer aquello que más te guste: leer un libro, practicar deporte, pintar, hacer manualidades, cocinar o pasar tiempo con la familia. El caso es aprovechar el tiempo más allá de delante de una pantalla, aportándote un tiempo de calidad y que nutra tus pasiones para sentirte mejor contigo mismo y salir de la rutina.
  • Practica la meditación o el yoga con el objetivo de poner tu mente en blanco, escuchar el silencio, controlar la respiración y aliviar el estrés. No hace falta que estés 45 minutos controlando tus respiraciones, sino que con 10 minutos de dedicación al día ya podrás notar los resultados y sentirte más aliviado. Si te escapas a un entono natural, aprovecha la ocasión para meditar unos minutos y verás cómo multiplicas sus beneficios.
  • Sal del ambiente urbano y escápate a la naturaleza para dejar de escuchar los ruidos de la ciudad, respirar aire puro y fluir. Puedes practicar senderismo, acampar, caminar por la playa o, simplemente, pasear por un parque. El objetivo es que puedas disfrutar del valor de la naturaleza y salir de lo cotidiano.
  • Compartir momentos con tu círculo más cercano también ayuda a desconectar. Quedar con los amigos o salir con la familia te permitirá desahogarte y olvidarte de las preocupaciones, pues la socialización es una de las herramientas más poderosas para disfrutar de la vida. Además, es una oportunidad para realizar planes distintos, como practicar actividades creativas, deporte en grupo, realizar excursiones, salir a conocer otros pueblos o ciudades…

La importancia de la alimentación

Aunque parezca  mentira, la alimentación también condiciona nuestros niveles de estrés y ansiedad. Alimentos con un alto contenido en cafeína, grasas, azúcar o sal tienen la capacidad de acelerar nuestra presión arterial o de generar dependencia.

Una dieta saludable y equilibrada, en la que primen las frutas, verduras, carne magra y pescado y un consumo moderado de carbohidratos será la más recomendada. Con una alimentación saludable controlaremos mejor los picos de glucosa y evitaremos los atracones o el picar entre horas.

Hongos en los pies: así debemos prevenirlos y tratarlos

La picazón en la piel, el mal olor o la descamación son algunos de los síntomas más comunes

Los meses de verano son una de las épocas del año que más afecta a la salud de nuestros pies, ya no sólo porque nos pasamos al calzado plano y abierto, sino porque el agua de las piscinas y del mar los deja más expuestos a la sequedad y al riesgo de sufrir infecciones. En estos lugares coincidimos con mucha gente y el agua estancada en combinación con las altas temperaturas son el caldo de cultivo perfecto para la proliferación de microorganismos.

Precisamente por estos motivos, los hongos en los pies son una de las infecciones más comunes y contagiosas en verano, pues caminamos descalzos por superficies contaminadas tales como el suelo de las piscinas, gimnasios o duchas públicas. La zona que resulta más afectada es entre los dedos de los pies, aunque también pueden dañarse las uñas y otras áreas.

¿Cómo saber si tengo hongos en los pies?

Para reconocer si estamos ante un caso de hongos en los pies, debemos atender a los siguientes síntomas:

  • Picazón y ardor en la piel.
  • Descamación, especialmente entre los dedos.
  • Enrojecimiento e inflamación.
  • Aparición de ampollas y grietas.
  • Mal olor en los pies.
  • Cambios en la apariencia de las uñas, como engrosamiento, decoloración hacia tonos amarillos o fragilidad.

Si sospechas de que tienes hongos en los pies ahora que sabemos qué problemas nos ocasionan, debes seguir unos pasos concretos para poder eliminarlos. De hecho, si no actuamos a la mayor brevedad posible, los síntomas pueden empeorar, ya que no desaparecen por sí solos.

Así que para deshacernos de estos microorganismos, el primero de los pasos será mantener una buena higiene en los pies, evitando la humedad y el sudor y secándolos adecuadamente. También debemos hidratarlos para que no se formen grietas que faciliten las infecciones, utilizando cremas con fórmulas regeneradoras a diario. El calzado abierto y transpirable serán nuestro mejor aliado para prevenir el sudor.

Los tratamientos pasan por ir al podólogo para que desinfecte y cure los pies y por la aplicación de cremas de uso tópico, lociones o polvos para aplicar directamente sobre la piel afectada. En los casos más graves, el médico puede llegar a recetar medicamentos orales antifúngicos que combatan la infección.

Prevenir la aparición de hongos en los pies

Para no contagiarnos, el paso más importante es utilizar calzado en superficies que pueden estar contaminadas, como por ejemplo, llevar chanclas hasta la entrada de la piscina. Pero también mantener una buena higiene y desinfección, tanto de los pies como de los zapatos que estemos usando. Para ello, además de tu rutina de limpieza e hidratación, puedes incluir la aplicación de aerosoles o polvos antimicóticos.

Mantener los pies secos será fundamental para que no proliferen los hongos e infecciones, así que procura secarlos bien cuando notes humedad. Usa calzado abierto o transpirable durante estos meses, evitando los zapatos fabricados con material sintético. Y, cómo no, realiza una visita rutinaria al podólogo para que evalúe la salud de tus pies.