Ambas disciplinas permiten quemar una gran cantidad de calorías en una hora
El Body Pump y el Body Combat son dos disciplinas deportivas muy demandadas por sus beneficios para el cuerpo y la mente.
Aunque suelen practicarse en el gimnasio, mucha gente lo hace en casa a través de tutoriales online, sobre todo ahora que algunos de los centros deportivos permanecen cerrado.
Pero, ¿en qué consisten ambas disciplinas? El Body Pump es un entrenamiento coreografiado donde se usan barras y discos de peso para tonificar, moldear y poner en forma el cuerpo a base de repeticiones. En una clase de 60 minutos se pueden llegar a quemar hasta 700 calorías y se trabajan todas las partes del cuerpo gracias a los diferentes movimientos: sentadillas, flexiones, etcétera.
Por otro lado, el Body Combat es un entrenamiento basado en las artes marciales, con intervalos y alta intensidad, cuyo objetivo es la mejora de la forma física, la destreza y la habilidad. En una sesión de una hora se pueden llegar a quemar hasta 800 calorías y permite trabajar todos los grupos musculares del cuerpo sin contar con ningún material.
Los beneficios de ambas disciplinas son numerosos. El Body Pump, además de proporcionar una pérdida de calorías considerable, aumenta la fuerza muscular del organismo, reduciendo las posibilidades de padecer una lesión. También mejora la flexibilidad, evitando que los músculos se tensen; y se fortalece el tren inferior y superior de cuerpo.
Por su parte, el Body Combat mejora la capacidad pulmonar y cardiovascular; favorece la agilidad y la coordinación; y mejora la tonificación muscular del cuerpo. Asimismo, es un método muy efectivo para eliminar el estrés.
CONSEJOS PARA UNA CLASE DE BODY PUMP Y BODY COMBAT
Ambas disciplinas son muy fáciles de practicar, pero es aconsejable seguir algunas recomendaciones para disfrutar de ellas plenamente, sobre todo en las primeras clases.
En el caso del Body Pump, debemos elegir bien el peso de los utensilios con los que vamos a trabajar, tanto para no agotarnos en exceso como para no hacer los ejercicios demasiado relajados.
También es importante hacer los movimientos con cuidado para no sufrir lesiones. Por ello, es aconsejable seguir las indicaciones del monitor en todo momento y fijarse bien en su forma de hacerlo. Es necesario aprender bien la técnica de cada ejercicio.
En cuanto al Body Combat, la recomendación primordial es la hidratación continua, antes, durante y después del ejercicio, ya que es una práctica que nos hará perder mucho líquido.
Asimismo, hay que dejar un margen de descanso entre sesión y sesión para que los músculos no se vean perjudicados.