Entre los síntomas más frecuentes se encuentran la diarrea, los vómitos y el dolor abdominal, aunque también puede darse fiebre, dolor muscular y escalofríos
La intoxicación alimentaria se produce cuando una persona come o bebe algo contaminado por virus, bacterias o toxinas. Entre los síntomas más frecuentes se encuentran la diarrea, los vómitos y el dolor abdominal, aunque también puede darse fiebre, dolor muscular y escalofríos.
Según el Servicio Nacional de Salud de Reino Unido, dependiendo del tipo de intoxicación alimentaria, el periodo de incubación es distinto, sin embargo, en la mayoría de los casos, los primeros síntomas aparecen en las primeras 12-48 horas.
Por lo general, la intoxicación suele durar de 1 a 3 días, pero según el tipo de bacteria, la gravedad de la infección y del estado general de salud de la persona, puede llegar a prolongarse hasta una semana.
CAUSAS DE LA INTOXICACIÓN ALIMENTARIA
El Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y del Riñón explica que la mayoría de las intoxicaciones alimentarias son causadas por infecciones por microbios, aunque los productos químicos nocivos también pueden ser los responsables de algunas de ellas.
Los microbios pueden propagarse a los alimentos en cualquier momento mientras se cultivan, cosechan, procesan, almacenan, envían o preparan.
La causa bacteriana más común de la intoxicación alimentaria es el Campylobacter, presente en las aves crudas, la leche sin pasteurizar, la carne roja y el agua sin tratar. Le sigue la Salmonella, que tiene como vía de contagio los alimentos a base de huevo crudo, carnes frescas, verduras regadas con aguas residuales, mariscos de aguas contaminadas y no depurados y, además, poca higiene por parte de manipuladores de alimentos, según la Organización de Consumidores y Usuarios.
CONSEJOS PARA EVITAR LAS INTOXICACIONES ALIMENTARIAS
- Lávate las manos y desinfecta los utensilios y superficies que vayan a estar en contacto con los alimentos.
- Mantén las carnes, aves, mariscos y huevos crudos separados de otros alimentos ya cocinados.
- Lava las fruta y verduras antes de consumirlas o cocinarlas.
- Cocina los alimentos el tiempo suficiente y a una temperatura medianamente alta para eliminar los microbios nocivos, destacan desde el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y del Riñón.
- Protege los alimentos de animales o insectos, ya que estos pueden ser portadores de bacterias.
- No utilices agua no higienizada, tanto para beber como para cocinar.