Las válvulas cardíacas suenan al abrirse y cerrarse. Pero, a veces, pueden ocultar dolencias
Un soplo es un sonido que produce la sangre al circular por las cavidades o válvulas del corazón o a través de los vasos sanguíneos. Se trata de un ruido que los médicos perciben cuando auscultan el corazón con el fonendoscopio.
En ocasiones la sangre fluye creando turbulencias y produciendo un sonido anormal, que es lo que se conoce como soplo cardíaco o soplo en el corazón.
En estos casos, el ruido puede advertir que hay una grieta en una de las paredes del corazón, que alguna válvula cardíaca está dañada o que los vasos sanguíneos son muy estrechos.
Soplo inocente o funcional
Según la Fundación Española del Corazón, existen soplos que no reflejan ninguna enfermedad. Estos soplos son los funcionales o inocentes y son frecuentes en bebés y niños, aunque la mayoría deja de oírse en la edad adulta.
Afortunadamente es muy fácil su detección con el estetoscopio, sobre todo, porque la sangre circula más rápido en los pequeños. Cuando el niño está excitado, hace ejercicio o tiene fiebre el soplo puede ser también más audible y los latidos más veloces.
Aún así, el menor puede correr, saltar y jugar sin ningún límite de actividad y, en la mayoría de casos, no necesitará tomar medicamentos ni cuidarse de forma especial.
¿Qué síntomas presenta?
Cuando el soplo es funcional, es decir, que no manifiesta una patología, no se produce ningún síntoma. Pero cuando es causado por una enfermedad cardíaca subyacente puede presentar algunos signos:
Sensación de falta de aire
Dolor en el pecho
Hinchazón o aumento repentino de peso
Mareos o desmayos
Aumenta el tamaño del hígado
Como ves, un soplo no siempre significa una enfermedad del corazón, ni implica la presencia de una cardiopatía. Pero, ante cualquier duda, consulta con un cardiólogo.