Botella inteligente, el oxígeno seguro

Los nuevos dispositivos móviles de Oxigenoterapia conceden más movilidad  y sencillez al paciente.

Todos respiramos el aire del ambiente, que contiene un 21% de oxígeno y un 79% de nitrógeno y otros gases. Esta cantidad de O₂ es suficiente para asegurar el correcto funcionamiento de todos nuestros órganos.

Sin embargo, en muchas enfermedades respiratorias se produce un fallo en la ventilación y en el intercambio de gases (O₂ y CO₂) que tiene lugar en los pulmones, lo que conlleva la aparición de una insuficiencia respiratoria (disminución de los niveles de O2 en sangre con o sin aumento de los niveles de CO2). Uno de los tratamientos para estas dolencias consiste en incrementar de forma artificial la concentración de O₂ en el aire que respira la persona. Sólo es eficaz si el paciente tienes niveles de O2 bajos.

El oxígeno domiciliario es fundamental para los pacientes que sufren una falta crónica del mismo. Esta insuficiencia necesita ser medida por el análisis de sangre arterial (gases en sangre o Gasometría arterial) o indirectamente por oximetría o Pulsioximetría (prueba que detecta la saturación de O₂ a través de la piel). Las cifras normales de presión de Oxigeno arterial son entre 75-100 mmHg , normalmente el medico puede prescribir tratamiento con Oxigeno cuando los valores son inferiores a 55-60 mmHg. Con niveles superiores no se ha demostrado ningún beneficio.

Una empresa de servicios cómo Praxair , es la mejor elección para proporcionar el Oxígeno en forma de botellas , concentradores o incluso oxígeno líquido, en función de las necesidades de la persona. Asimismo, para conseguir la máxima eficacia se recomienda usarlo como mínimo 16 horas al día, incluyendo siempre la noche. Aunque no siempre se sienta la falta de oxígeno, el cuerpo puede sufrir daños si los niveles en sangre son lo suficientemente bajos.

Ventajas de la botella de Oxigeno

La botella inteligente incluye los aspectos positivos de los envases compactos (seguridad, manejabilidad y ligereza), pero incorpora, además, las últimas novedades tecnológicas.

  1. Claridad: posee un display digital en el que aparece la información relevante de forma clara. En la pantalla se muestran los iconos del consumo y el caudal de oxígeno, los litros de gas que quedan y el tiempo de autonomía del aparato.
  2. Seguridad: el dispositivo cuenta con alertas sonoras y visuales que avisan al llegar a niveles críticos de gas (¼ de su capacidad) y cuando quedan solo 15 minutos de administración del caudal seleccionado. Estos datos proporcionan al paciente una mayor sensación de seguridad y garantía.
  3. Eficiencia: los parámetros básicos son visibles en la pantalla digital, lo que aporta más fiabilidad. Igualmente, el suministro de gas se calcula cada minuto, haciendo un uso eficiente del mismo, por lo que se requieren menos cambios de botellas, optimizando el consumo al máximo.
  4. Sencillez: tiene un diseño ergonómico y fuerte que protege de golpes la válvula integrada, el regulador y el sistema electrónico. Además, su estructura inteligente hace que sea más fácil de levantar, mover y operar en cualquier situación. En definitiva, el manejo resulta más sencillo y cómodo.

Los especialistas aconsejan mantener una correcta higiene de la botella y, sobre todo, no fumar, ya que el tabaco puede suponer la pérdida de efectos del tratamiento de oxigenoterapia y un alto riesgo de incendio.

Como ves, la botella inteligente ofrece mayor confianza, tranquilidad y autonomía a las personas, permitiendo a los equipos médicos enfocarse en lo más importante, el cuidado del paciente.

Así mejora el insomnio

Te contamos las recomendaciones para conseguir que tu sueño nocturno sea reparador.

Las personas invertimos, de media, un tercio de la vida durmiendo. De hecho, dormir es una actividad necesaria, ya que con ella se restablece el equilibrio físico y psicológico básico del organismo. Sin embargo, la necesidad de sueño cambia, en cada persona, dependiendo de la edad y el estado de salud y emocional. Así, el tiempo ideal de sueño es aquel que nos permita realizar las actividades diarias con normalidad.

No obstante, en muchos casos el insomnio nos impide conseguir ese descanso óptimo tan vital. Los inconvenientes por no dormir adecuadamente suelen aparecer cuando los problemas de calidad y/o cantidad con el sueño son intolerables, y es entonces cuando aparecen síntomas como alteraciones del humor, dificultad para concentrarse, cansancio físico y mental, tensión y ansiedad.

De acuerdo con la Sociedad Española del Sueño, de los factores que más influyen en el insomnio  destacan los psicológicos (darle vueltas a las cosas, no saber manejar las emociones negativas, tener hábitos inadecuados), el estrés y el miedo a no dormir.

10 Consejos que favorecen el sueño

Existen una serie de hábitos de sueño saludables que podemos seguir para disminuir los problemas de insomnio y favorecer, así, un sueño vigorizante.

  1. Horario fijo: mantén un horario establecido para acostarte y levantarte, incluidos fines de semana y vacaciones. Los cambios constantes en la hora de dormir aumentan la probabilidad de sufrir dificultades crónicas para dormir.
  2. En la cama, el tiempo justo: quédate en la cama el tiempo suficiente, pero no más, adaptándolo a tus necesidades reales de sueño. Se ha comprobado que permanecer menos tiempo en la cama mejora el sueño y, al contrario, estar mucho tiempo puede producir un descanso fragmentado y ligero.
  3. Si no te duermes, levántate: si han pasado 30 minutos desde que te acostaste y sigues aún sin dormir, levántate de la cama y haz algo que no te active demasiado, como, por ejemplo, leer una revista. Cuando vuelvas a tener sueño regresa al dormitorio. El objetivo es que asocies la cama con quedarte dormido lo antes posible.
  4. Evita las siestas: huye de la siesta y de las situaciones que la propician. En casos concretos, se puede permitir una cabezadita después de comer, pero no más de 30 minutos.
  5. Abandona el alcohol y el tabaco: ambos son hábitos insanos, ya que además de perjudicar tu salud, dañan el sueño. El alcohol provoca despertares a lo largo de la noche y la nicotina estimula el sistema nervioso.
  6. Ninguna actividad mental: evita realizar en la cama actividades como ver la televisión, leer, escuchar la radio, comer, hablar por teléfono, discutir… Nuestro cerebro necesita ligar el dormitorio y la cama a la actividad de dormir. No le mandes al cerebro mensajes contradictorios.
  7. Haz ejercicio moderado: realiza ejercicio suave (como pasear) más de 30 minutos y al menos tres horas antes de ir a dormir. Si realizas ejercicio intenso en las 3 horas previas a acostarte, el sistema nervioso puede activarse y perder la sensación de somnolencia.
  8. Cena ligero: procura no irte a la cama hasta que hayan pasado dos horas desde la cena. Un plato copioso puede ocasionarte una digestión pesada y causarte insomnio. Opta por recetas sencillas, evitando los guisos, los fritos y las salsas.
  9. Rutina nocturna: repite cada noche el mismo ritual de acciones que te ayuden a prepararte mental y físicamente para irte a la cama. Lávate los dientes, ponte el pijama, prepara la ropa del día siguiente….
  10. Practica ejercicios de relajación: practicar ejercicios de relajación antes de acostarte puede favorecer a que duermas mejor. Haz respiraciones lentas y relajadas. Imagina que eres como un globo que se hincha lentamente y luego se deshincha.

Para determinar la buena calidad del sueño hay que tener en cuenta la duración, la continuidad y la profundidad del mismo. Sin embargo, si tienes algún trastorno de sueño que no mejora, lo aconsejable es que acudas a tu médico.

Está en tus manos recuperar o aprender nuevos hábitos en tu vida para mejorar tu sueño.

Consejos para aliviar dolores musculares

Te contamos cómo recuperarte de las molestias de las agujetas y de los calambres.

Los dolores musculares o mialgias son reacciones adversas que experimentan nuestros músculos como consecuencia de un esfuerzo físico, una enfermedad (gripe, fibromialgia, lupus) o del calor excesivo, y pueden aparecer en muchos momentos de nuestra vida.

Las molestias musculares más habituales son los calambres y las agujetas. Los primeros son contracciones involuntarias que paralizan los músculos, mientras que las agujetas se producen después de un gran trabajo físico y crean una sensación de agarrotamiento.

Cómo calmar las agujetas y calambres

El tratamiento habitual del dolor muscular producido por cansancio del músculo obliga a realizar un tiempo de reposo adecuado y seguir una serie de medidas:

  1. Usa compresas calientes: aplica compresas calientes sobre la zona específica o toma un baño caliente, si el dolor es general.
  2. Reposo: intenta guardar cama unos días, así dejarás que tus músculos se recuperen y se relajen.
  3. Aliméntate bien: sigue una dieta con abundante fibra y proteínas de calidad que nutran el músculo. Puedes encontrar estos nutrientes funcionales en carnes magras (pollo, pavo), pescado azul (anchoa, atún, salmón, sardina), legumbres, huevos y lácteos desnatados.
  4. Gana flexibilidad: intenta hacer ejercicios de fortalecimiento y flexibilidad, una vez hayas superado el dolor y como herramienta de prevención. El yoga, el taichí o el pilates pueden ayudarte a elongar y fortalecer los músculos. Eso sí, asegúrate de que sea un ejercicio leve o moderado para no empeorar el dolor muscular.
  5. Bebe mucha agua: cuando los músculos están doloridos solemos estar menos activos, lo que puede favorecer el estreñimiento. Para remediarlo, toma cantidad de líquidos y no olvides consumir suficiente fibra (fruta, verdura y cereales integrales).
  6. Escribe un diario del dolor: anota cuándo aparece, porqué, cuál es la intensidad y cuánto dura, si afecta a uno o varios músculos, si es intenso, etc. Esto es importante para descartar si se produce por el ejercicio (que es lo más fácil de distinguir) o si la causa es más compleja y hay que hacer otro tipo de pruebas.
  7. Masajea la zona: darse un masaje con aceites esenciales puede ayudar a aliviar las molestias y a recuperarse de la mialgia. Los aceites de menta, árnica y hierba de San Juan contienen propiedades analgésicas y antiinflamatorias que mitigan el dolor.

Ponte en contacto con tu médico si notas adormecimiento y hormigueo en las piernas, un dolor intenso en la espalda, incontinencia intestinal o urinaria o dolor en la cintura o el pecho, ya que podrían ser indicios de una afección médica grave.

Recuerda que el dolor tiene siempre un componente subjetivo: algunas personas lo toleran muy mal y otras, que apenas se quejan, tienen el umbral muy alto. Será un médico quien pueda distinguir qué tan intenso es ese dolor y diferenciar cuál es la causa que lo produce, para dar el mejor tratamiento posible.

Para cualquier dolor, la paciencia es lo mejor.

¿Cuánto deporte hay que hacer a la semana?

Te contamos qué tipo de actividad física y cuánto tiempo es aconsejable, según la OMS.

Numeroso estudios han demostrado que el sedentarismo perjudica seriamente la salud y puede conducir a enfermedades cardiovasculares, hipertensión y diabetes. Uno de los tres pilares fundamentales de un estilo de vida saludable es la práctica de ejercicio físico diario (los otros dos son la alimentación y los hábitos).

Asimismo, son muchos los beneficios que nos aporta el deporte: nos ayuda a mantener un peso adecuado, fortalece nuestros huesos y articulaciones y mejorar el sueño y nuestro estado de ánimo.

Ejercicio intenso o moderado

La Organización Mundial de la Salud distingue dos tipologías de actividad  física, en función de la intensidad y del esfuerzo de la misma:

Actividad física vigorosa: demanda gran cantidad de esfuerzo, por lo que provoca una respiración rápida y un aumento significativo de la frecuencia cardíaca. En este grupo encontraríamos modalidades como el running, el aeróbic, la natación o el futbol.

Actividad física moderada: requiere  un esfuerzo moderado del cuerpo y que acelera de forma perceptible (pero no en exceso) el ritmo cardíaco. Algunos ejemplos de ejercicio suave son bailar, caminar, jardinería o las tareas domésticas.

Tiempo recomendado

Los expertos recomiendan realizar una actividad vigorosa al menos durante hora y media cada semana, una actividad moderada durante dos horas y media por semana y tres horas y media de algún ejercicio ligero. También se puede realizar un día una actividad de más intensidad y combinarla con otras actividades más suaves.

El mínimo recomendado por los especialistas es de 30 minutos de actividad media durante tres días a la semana. Si no dispones de ese tiempo, podrías realizar ejercicios intensos durante 15 minutos todos los días.

Entrenamiento completo

Con el objetivo de que tu entrenamiento sea perfecto, puedes combinar varios tipos de ejercicios, sesiones aeróbicas (como el steps o el zumba) con modalidades de tonificación (crossfit, bodypump) y disciplinas, como el yoga o el pilates, que mejoran la flexibilidad y la postura.

Compagina días de ejercicio intenso con actividades más suaves el día después, de este modo optimizarás el gasto energético y pondrás al límite tu resistencia. Es preferible descansar al menos dos jornadas por semana, para que los ligamentos y músculos recuperen fuerzas y no se lesionen.

También puedes ponerte metas y desafíos personales, como mejorar tu marca personal, participar en una carrera o lograr el peso saludable que tienes en mente, de esta forma, te sentirás motivado para superar las dificultades y seguir hacia tu meta.

Hacer deporte en compañía es más estimulante, además, te ayudará a ser más comprometido con esa cita regular y te será más complicado tirar la toalla.