Las ronchas suelen aparecer minutos después de la exposición al frío y, por lo general, desaparecen a los pocos minutos u horas después
La alergia o urticaria por frío es una afección de la piel provocada por el frío que se caracteriza por la aparición de manchas rojizas en la piel que generan picor. Es más frecuente en adultos jóvenes y niños y se produce tras la exposición a las bajas temperaturas, el agua fría e, incluso, al ingerir bebidas o alimentos muy fríos.
Según la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica, las ronchas suelen aparecer minutos después de la exposición al frío y, por lo general, desaparecen a los pocos minutos u horas después.
Por lo general, la intensidad de los síntomas es leve, sin embargo, en raras ocasiones se pueden llegar a producir problemas de salud más graves, como bajada de tensión, mareos o pérdida de conciencia.
No se sabe la causa exacta de la urticaria por frío, no obstante, tal y como destacan desde Clínica Mayo, parece que algunas personas tienen células de la piel muy sensibles, ya sea por un rasgo hereditario, un virus o una enfermedad.
DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO
Para diagnosticar la urticaria por frío, basta con aplicar un cubito de hielo sobre la piel durante cinco minutos aproximadamente. Si se padece, la piel experimentará una mancha rojiza minutos después de la exposición al frío.
En cuanto al tratamiento, la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica detalla que este se basa en la educación del paciente para que se proteja del frío; es decir, que se abrigue de forma adecuada en los días con temperaturas más bajas y proteja las partes del cuerpo más expuestas, como la cara y las manos, con bufandas y guantes.
Asimismo, para aliviar los síntomas provocados por la alergia al frío se puede recurrir a los antihistamínicos, que bloquean la liberación de histamina que provoca dichos síntomas. En casos de reacciones graves se recomienda llevar adrenalina o corticoides.